5 años de gestión de Cambridge Structural Database para las instituciones académicas españolas por parte de la Unidad de Recursos de Información Científica para la Investigación (URICI)

Enredadera, nº 32, diciembre 2018

Mercedes Baquero Arribas
mbaquero@bib.csic.es
Unidad de Recursos de Información Científica para la Investigación (URICI-CSIC)
Madrid

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Cambridge Structural Database (CSD) ha sido una de las primeras bases de datos científicas que empezó a funcionar a nivel mundial. Nacida en 1965 en el Cambridge Crystallographic Data Centre (CCDC), este se convirtió en compañía independiente en 1989, sin perder por ello su personalidad de institución no lucrativa. La base llega en la actualidad a las comunidades académicas de más de 70 países.

CSD está considerada una base de datos única y referencia mundial en el campo de la química cristalográfica. En el presente es parte de un sistema de información mayor, que se complementa con otros productos y se esfuerza por mejorar tanto el software que utiliza como los canales de distribución de los contenidos.

 

Modelo de distribución anterior a 2014

Desde mediados de la década de 1980 y hasta 2012 el CSIC, a través del Departamento de Cristalografía y Biología Estructural del Instituto de Química Física “Rocasolano” (Madrid) ofreció un servicio gratuito de licencias para algunas de las bases de datos estructurales más importantes de cristalografía.

En concreto sobre la base de datos CSD, el Departamento actuaba entonces como Centro Nacional Asociado (NAC) al Cambridge Crystallographic Data Centre y gracias a la financiación concedida por el CSIC y la ayuda del CCDC, distribuía licencias gratuitas de la base de datos CSD a más de 130 instituciones académicas españolas y latinoamericanas.

Sin embargo, debido a las importantes restricciones en el presupuesto para investigación en España (la crisis económica que obligó en 2012 a reducción y/o cancelación de suscripciones de recursos de información), estos programas generales de licencias tuvieron que suspenderse o iniciar nuevos modelos de distribución, ya no gratuita, a lo largo de 2013.

 

Desde 2014

En 2014 se le propone a la URICI ser el NAC (National Affliated Center) con CCDC, fundamentalmente porque el nuevo modelo implicaba una centralización económica, movimiento de pagos y facturas, firmas de licencias de uso y aceptación de presupuestos, entre el CSIC, el CCDC y cada una de las instituciones españolas suscriptoras, que era una enorme carga para el Departamento de Cristalografía y Biología Estructural.

Básicamente se trataba de que CCDC tuviera en la URICI un interlocutor único para la gestión administrativa y económica. Pero también, la URICI se ha convertido en una pequeña medida en difusora hacia la comunidad del CSD en España de las novedades, congresos y actualizaciones que comunica el CCDC al NAC.

Un paso más en el compromiso con el CCDC fue la realización en 2016 de 2 Workshops en España sobre CSD, que tuvieron lugar en la sede de la URICI en Madrid.

La centralización para España de esta licencia por parte de la URICI ha coincidido además con dos cambios que la han mejorado sustancialmente:

Hasta 2014 cada institución debía elegir entre un tipo de acceso: para dos usuarios, entre 3 y 6, o ilimitado. Pero, a partir de 2015 se ofrece al NAC español, como al resto de los NACs de otros países, firmar un acuerdo nacional, con la ventaja de que todos los miembros de ese acuerdo pasan a tener condición de usuarios ilimitados de CSD. Esto significa que se amplía las posibilidades de acceso para pequeños grupos y áreas próximas a la investigación, que de otro modo difícilmente disponían de la base de datos CDS y de todas las herramientas que esta incluye.

Otro avance incontestable del modelo es que dejan de recibirse las versiones en DVD de la base de datos. Eran varios DVDs al año, que llegaban al NAC para ser reenviados a su vez por correo postal a cada suscriptor. Desde 2015 las actualizaciones se descargan vía web, y el NAC es sólo transmisor de contraseñas de acceso, una vez que confirma a CCDC que la gestión económica y la firma de licencias se ha realizado correctamente.

La comunidad de suscriptores españoles es muy estable. Entre 2014 y 2018 el acceso a esta base se ha gestionado para una media anual de 35-40 instituciones distribuidas por todo el país. Además de estas, 14 centros/institutos del CSIC se benefician también de este acceso.

Otros enlaces de interés:

Blog del CCDC: https://www.ccdc.cam.ac.uk/Community/blog/

Twitter: https://twitter.com/ccdc_cambridge?lang=es

 

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