Montserrat Olivé Ollé . Universitat Rovira i Virgili. Centro de Recursos para el Aprendizaje y la Investigación (Barcelona) |
La aplicación de las tecnologías de la información en las bibliotecas universitarias, así como la evolución e introducción de las citadas tecnologías en la sociedad, han sufrido un notable cambio en el comportamiento de los usuarios del servicio de préstamo interbibliotecario. La facilidad en las búsquedas de información, el acceso a documentos a texto completo, el uso de catálogos colectivos de consorcios y redes ha influido, sin duda, en los hábitos de consulta de los usuarios.
Veinte años atrás, el usuario de préstamo interbibliotecario traía listas de documentos que solicitaba le facilitase la biblioteca. El bibliotecario a su vez comprobaba las listas y entregaba copias y originales de todo aquello que se hallaba entre los fondos de su institución. Los documentos que no estaban disponibles se pedían a través del préstamo interbibliotecario, pero sin la posibilidad de poder informar a priori cuánto tiempo tardaría el usuario en recibir su información. El bibliotecario desempeñaba un papel de intermediario necesario. Podían pasar semanas antes de que el usuario recibiera el documento, si es que lo llegaba a recibir. Cuando lo recibía, normalmente estaba muy agradecido de ello y elogiaba al bibliotecario que le explicaba el periplo que había hecho para obtener tal documento. Eran, sin ir más lejos, los años ochenta, principios de los noventa del siglo pasado. Las peticiones de PI se tramitaban por correo postal de biblioteca a biblioteca, y se gestionaban rellenando los formularios IFLA o bien rellenando los formularios específicos de alguna que otra institución, por ejemplo el CSIC, el IQS, la British Library etc. Existían solamente las ediciones impresas de catálogos de publicaciones periódicas. Fueron años en los que la gestión de las peticiones todavía era muy manual.
Al final de la década de los noventa, dos factores fueron claves para el desarrollo de los servicios de préstamo interbibibliotecario. El primero fue el “boom de la información”, con un aumento considerable de la producción editorial y la imposibilidad lógica de poseer todos los documentos que satisficieran las necesidades de información de los usuarios. El segundo factor, aunque no menos importante, fue la introducción del concepto de biblioteca moderna o biblioteca sin paredes, donde primaba el Just-in-time frente el Just-in-case. Hacer accesibles las publicaciones al usuario donde y cuando las necesitara como elemento esencial para su desarrollo económico, social, educativo y personal era el objetivo del programa sobre Disponibilidad Universal de Publicaciones (DUP). Fue también el momento del programa del Control Bibliográfico Universal (CBU). Ambos programas de la IFLA se basan en la cooperación interinstitucional para lograr sus objetivos.
El auge de los servicios de préstamo interbibliotecario se produce en este contexto, como la forma más elemental de la antigua cooperación entre bibliotecas; es el momento de la aparición de redes (Rebiun, Red de Bibliotecas del CSIC, Mecano…) y consorcios (CBUC, CBUA, Madroño, etc.) con claros objetivos, desde la creación de catálogos colectivos hasta la rentabilización de costes, esfuerzos y recursos.
Cabe destacar en este contexto la cooperación institucional entre las bibliotecas universitarias, las bibliotecas especializadas y de investigación, pero sobre todo, la colaboración y el trabajo cooperativo entre las personas, los profesionales, de las distintas instituciones. La gran dedicación para compartir experiencias, casos prácticos en bibliotecas, la creación de grupos de trabajo de préstamo interbibliotecario (como el Grupo de Trabajo de PIB de Rebiun, el Grupo de trabajo de PI del Consorcio de Bibliotecas Universitarias Catalanas, o el Grupo de usuarios de SOD) para aunar esfuerzos y elaborar procedimientos de trabajo en el servicio, proponiendo indicadores, estadísticas, unificación de tarifas, etc.
También es la hora del cambio de los procesos manuales del PI para pasar a los sistemas informáticos de gestión del PI. Las aplicaciones informáticas de gestión del préstamo interbibliotecario entran en escena. Al principio, sólo se introducen las peticiones en el ordenador que a su vez facilita la respuesta mediante una carta o formulario IFLA. Se usa el fax para obtención de artículos urgentes, pero siempre a un coste elevado. Se implementa paulatinamente el uso del correo electrónico para recibir las solicitudes de los usuarios a través de formularios, y se agiliza el proceso de introducción de los datos de las peticiones en el programa de gestión, permitiendo dedicar más tiempo al personal del servicio a las tareas de localización y obtención del documento. Se introducen muchas innovaciones y mejoras en el PI: transmisión electrónica de peticiones, transmisión electrónica de documentos, recepción de respuestas negativas, o la posibilidad de gestionar reclamaciones, prórrogas y mensajes. El usuario final está informado constantemente.
A finales del siglo XX y a principio del actual se sigue trabajando en compartir y aunar esfuerzos para aplicar las nuevas tecnologías de la información en los servicios de préstamo interbibliotecario. Los programas automatizados de PI son ahora más complejos pero muy útiles (aplicación de estándares para enviar peticiones al extranjero, a la British Library, al Inist, a Subito, a OCLC, enlaces a catálogos colectivos, protocolos Z3950…) e integrados (gestión de estadísticas, facturación…). El programa GtBib destaca como el más utilizado entre las bibliotecas universitarias españolas. Aparecen nuevos sistemas de préstamo entre bibliotecas de distintas instituciones como el préstamo consorciado de documentos originales desde los propios sistemas de préstamo (Millenium).
El usuario sigue teniendo necesidades de información y quiere una respuesta inmediata a sus necesidades. ¿El usuario de biblioteca universitaria utiliza el servicio de préstamo interbibliotecario siempre que en su biblioteca no tiene acceso al documento que necesita?. Borrego (2014) observa distintos comportamientos del personal docente universitario para acceder a un artículo o libro al que no tiene acceso a través de su biblioteca: el docente en Cataluña tiende a buscar versiones gratuitas en Internet, pedir el documento a un colega, comprar el titulo o contactar personalmente con el autor. En cambio en los Estados Unidos, afirma que utiliza el servicio de préstamo interbibliotecario, y entre el profesorado británico, simplemente rechaza ese documento para localizar otro parecido.
Personalmente creo que el usuario utiliza el servicio de PI en el momento en que lo necesita. Se han realizado campañas de difusión del servicio entre los usuarios universitarios (estudiantes y profesores) y, en realidad, no han incidido en un uso mayor. También es cierto que el usuario universitario, sobre todo el docente, si ha obtenido el documento con rapidez, agilidad y a un coste razonable, el servicio lo acabe por fidelizar. Otros usuarios, sobre todo los estudiantes, utilizan el servicio de préstamo pero no quieren ni saber de dónde les llega el documento (en el caso de la URV: préstamo intercampus, préstamo consorciado, préstamo interbibliotecario). En definitiva, deberemos estar atentos a los comportamientos de los usuarios respecto al uso y acceso de la información (open acces, posibilidad de acceso a libros electrónicos por PI, acceso a la digitalización de fondos antiguos) para adaptarnos y ofrecer posibilidad de seguir siendo necesarios.
Siempre nos quedará aquel documento que el usuario no podrá obtener por sus propios medios y al que la Biblioteca, hoy Centro de Recursos para el Aprendizaje y la Investigación (CRAI), y la capacidad de búsqueda del profesional bibliotecario con unos conocimientos especializados en la obtención, le seguirá siendo el valor añadido y útil para su obtención.
Bibliografía
Borrego, Ángel (2014). Comportament informatiu del professorat de les universitats catalanes. Estudi realitzat per encàrrec del Consorci de Serveis Universitaris de Catalunya (CSUC). Área de Biblioteques, Informació i Documentació. [Informe].
Casares, L., Edo, M., Olivé, M., Rodríguez, JM. (1999). Projectes de cooperació en matèria de préstec interbibliotecari dins el marc del Consorci de Biblioteques Universitàries de Catalunya.
Duarte, G., Olivé, M. (1996). Una experiencia práctica del correo electrónico en el servicio de obtención de documentos de la Universitat Rovira i Virgili. Fesabid.
Rodríguez-Gairín, JM. 20 años de automatización de préstamo interbibliottecario en España (1992-2012). (2012). El profesional de la información, 21 (6), 557-566.
Webgrafia
REBIUN – Préstamo Interbibliotecario: http://www.rebiun.org/prestamoInterbibliotecario/Paginas/default.aspx
UNIVERSITAT ROVIRA I VIRGILI – Servei de préstec interbibliotecari i d'obtenció de documents (PI/SOD): http://www.urv.cat/crai/que-us-oferim/servei-prestec/prestec-interbibliotecari.html