III. Desarrollo de sistemas para una agricultura acorde con las buenas prácticas medioambientales.

III. Desarrollo de sistemas para una agricultura acorde con las buenas prácticas medioambientales

Se pretende afrontar este objetivo en un contexto mixto. Por un lado, de forma disciplinar en los aspectos relacionados con el suelo y el agua y desde una perspectiva de gestión sostenible. Por otro, a nivel de cultivos de amplio interés en nuestro entorno, actuando de forma multidisciplinar para desarrollar tecnologías que, adaptadas a nuestras condiciones agroclimáticas y acordes con las buenas prácticas medioambientales, aseguren una óptima productividad agrícola. Los objetivos específicos de este apartado son:

III.a. Optimización del uso del suelo: caracterización, degradación y conservación

El valle medio del Ebro es uno de los espacios más sensibles a la desertificación de Europa por sus características edáficas, climáticas y de vegetación. En este contexto fisiográfico, cualquier impacto antrópico puede producir importantes efectos medioambientales con repercusiones directas sobre el suelo como recurso no renovable. La mejora de las prácticas agronómicas para conseguir una protección del suelo frente a los distintos procesos de degradación constituye un objetivo del mayor interés económico y ambiental.

III.b. Optimización del uso del agua en la agricultura de regadío

La gestión de los recursos hídricos destinados al regadío tiene unas graves carencias en España y muy concretamente en el valle del Ebro. Se pretende crear el soporte tecnológico para superar estas carencias y optimizar así el uso de este bien escaso y estratégico.

III.c. Desarrollo de tecnologías para los principales cultivos de nuestro entorno

La agricultura de futuro exige una fuerte tecnificación, orientada fundamentalmente a los aspectos de eficiencia económica, de calidad y de respeto al medioambiente. Se hace necesario desarrollar y transferir al sector tecnologías más eficientes y paquetes tecnológicos, relativos al conjunto de las labores agrícolas, que permitan la competitividad, sea económica o medioambiental, de nuestros agricultores.