LA DIGITALIZACIÓN DEL ARCHIVO CHICHARRO
Antes de proceder a la digitalización de la colección se realizó una limpieza de las placas para eliminar las manchas de humedad y polvo. Esto se consigue limpiando la cara de la placa que tiene la emulsión con agua destilada y su reverso con un pincel de pelo suave para evitar, en la medida de lo posible, dañar la emulsión -que es lo más delicado de la placa-. Después, cada placa se archiva individualmente y todo el conjunto se custodia en instalaciones especiales que aislan el material fotográfico de la humedad, de la luz y de los cambios de temperatura. La reproducción del archivo se realiza con una cámara digital, haciendo una fotografía a cada una de las placas por separado. Para eso se coloca cada pieza sobre un negatoscopio (caja de luz) y la cámara sobre un trípode; de este modo, se ilumina la placa desde atrás y se consigue una mayor calidad. Este procedimiento se tiene que realizar en una habitación totalmente a oscuras para eliminar la aparición de luces parásitas en la copia final. Una vez transferida la imagen digital al ordenador se procede a su tratamiento mediante un programa informático que permite retocarla y mejorarla. Todo este proceso asegura que se pueda recuperar la imagen inicial sin manipular ni dañar físicamente el negativo original. Habitualmente este tipo de operaciones se realiza con un escáner pero, en este caso, por tratarse de un bien de carácter histórico y por su delicado estado de conservación, se optó por la cámara digital que es menos agresiva (el escáner desprende ozono y luz ultravioleta que influyen negativamente en la conservación de materiales fotográficos). A continuación, cada placa es, además, inventariada. La catalogación de la colección se realiza dentro del programa desarrollado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas para restaurar y poner en valor su patrimonio histórico. Para esto, se ha desarrollado un software específico en el que se registran los datos más significativos tanto de la imagen (técnica, motivo, estado de conservación...) como del autor (pequeña biografía, ámbito de producción...) y de las características de la digitalización. Así, cada pieza tiene un número de serie y un título que la identifica, lo que facilitará el acceso y la búsqueda de aquellas personas interesadas en consultar los fondos de esta colección. Al final de este proyecto podrá consultarse el catálogo de este archivo fotográfico a través de la web del CSIC y la nueva colección (digitalizada) estará a disposición del público en la biblioteca del Instituto de Estudios Gallegos Padre Sarmiento. |